Dicen en los países anglosajones que ‘se necesita una aldea
para criar a un niño’. Esta frase cobró todo su sentido cuando me
convertí en mamá.

Con una trayectoria como Maestra, Monitora, Project Manager en
una gran escuela online y apasionada del mundo de la
educación, creía estar más que preparada. Pero la llegada de mi
pequeña criatura me demostró que la teoría es muy distinta de la
práctica.

Desde que comencé mi carrera de Magisterio, no he dejado de
formarme y explorar el mundo de la educación. He leído
decenas de libros y realizado formaciones en pedagogías activas,
educación positiva y crianza respetuosa, siempre con el objetivo
de encontrar herramientas que transformen la teoría en
práctica y que realmente conecten con las necesidades de cada
niño y familia.

En este camino, descubrí que la información abundante no
siempre significa claridad, y que muchas veces faltan
herramientas sencillas, experiencias reales y alineadas con los
valores de mi familia. Pero lo que más he echado de menos es
esa aldea que te acompaña, te escucha y camina contigo en
este maravilloso viaje.

Así nació Mami Aran, una aldea digital creada para que no
camines sola en este viaje. Aquí comparto herramientas,
recursos y mi experiencia, con la esperanza de que tu crianza sea
más serena, auténtica y disfrutona.

¡Gracias por formar parte de esta tribu!